lunes, 29 de diciembre de 2008

De moda

El Obispado de Huelva no acudió ayer a la madrileña plaza de Colón a participar en la denominada Misa de la Familia que había convocado el cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela. De Andalucía tampoco fueron los de Málaga y Almería, aunque todos animaron a sus fieles a que acudieran «libre y voluntariamente» a la que acabó siendo una multitudinaria cita. Extraña, de entrada, estas ausencias en uno de los días grandes del jefe de la Iglesia española, aunque, para que no haya dudas, habrá que preguntar a sus responsables por los motivos de su no asistencia a un encuentro en defensa de algo que los líderes católicos creen en peligro: la familia. Así, en abstracto. Con todo, siempre he tenido la impresión personal de que Rouco Varela separa más que une, aunque, como digo, esto no deja de ser una percepción que no tiene por qué estar relacionada con la ausencia de algunos obispos en la misa de ayer. O sí. Habrá que preguntarlo, ya digo. En la eucaristía, el cardenal arzobispo de Madrid habló de modas, que, a lo que se ve, es un tema que domina. Dijo, por ejemplo, que «es posible vivir el matrimonio de forma distinta a lo que está de moda». ¿Qué es lo que está de moda? Sin duda, el matrimonio convencional, que sigue ganando por goleada a aquellas otras uniones que la Iglesia detesta y considera un verdadero peligro para la humanidad. Aseguró también Rouco, sin duda como experto, que el matrimonio cristiano es el que responde a «las exigencias más hondas y auténticas del amor», como si las demás uniones estuvieran únicamente movidas por intereses económicos o de otra índole aún más oscura. Estas tremendas generalizaciones no pueden más que conducir a enormes injusticias. Rouco concluyo su homilía con otra: «El futuro de la humanidad pasa por la familia cristiana». Cuando se habla de esta forma tan general no puede más que caerse en el error. Unos días después del bombardeo nazi de Londres, un periodista le preguntó a Churchill su opinión sobre los alemanes. «No lo sé, no los conozco a todos», respondió. Es cuanto menos audaz hablar en estos términos tan absolutos y afirmar con la rotundidad que usa Rouco que la familia está en peligro porque se haya permitido, por ejemplo, el matrimonio entre homosexuales, en los que, por supuesto, no cabe el amor verdadero, aunque estén «de moda». También suponía un peligro horroroso para la familia el divorcio, aprobado allá por los albores de la democracia con la oposición feroz de la Iglesia y la derecha, que es casualmente la que más lo ha usado. Rouco debe analizar muy seriamente quién está en este país verdaderamente pasado de moda.

Publicado en El Mundo-Huelva Noticias el 29 de diciembre de 2008.

8 comentarios:

Juan Duque Oliva dijo...

Me has emocionado y mucho.

Gracias por escribir columnas como esta, son más que necesarias.

Un abrazo.

Andrés dijo...

Un abrazo, Juan

Anónimo dijo...

Al jefe de la iglesia parece que no le entra en la cabeza que vivimos en un pais laico y libre, donde cada cual puede tener los ideales que quiera siempre dentro de los margenes de la ley.
Ellos promulgan la igualdad,el amor al progimo y el respeto a los demas, pero ¿que demás? solo alos que piensan igual que ellos. No se puede predicar unos ideales de paz e igualdad cuando son ellos mismos los primeros que no lo hacen, declarandole la guerra a ciertos colectivos que tienen los mismos deberes y derechos que cualquier español.
¿Porque no les entran en la cabeza que este pais no es católico sino laico? ¿Tienen miedo porque cada vez tienen menos respaldo de la sociedad?. Creo que se han quedado atrasados en el tiempo y que si hubiesen evolucionado con los tiempos y no se hubiesen quedado anclado en los tiempos de la inquisición, les estaria llendo bastante mejor.
Soy católico no practicante, pero hay cosas de esta gente que no me entran en la cabeza y son tan sencillas y tan faciles de entender que no se como no rectifican dan su brazo a torcer.

ercanito dijo...

No defenderé lo indefendible, y menos yo, que no soy ejemplo de familia cristiana, pero es acojonante el poder de convocatoria que siguen teniendo en España, con el laicismo y liberalismo religioso que se trata de predicar desde y hacia la sociedad actual. No será porque es gratis y dan bocadillos. Yo no lo haría para aguantar dos horas escuchando cantar a Paco de Lucía (si fuera tocas sí). Eso sí, una vez más, la crítica más homófoga la hace un maricón.

Anónimo dijo...

ercanito,aclara tus comentarios por favor

Anónimo dijo...

alfonso macias
te lo dije, me encanta tu forma de escribir y tus criticas.. un abrazo

Zapateiro dijo...

Andrés llego muuuuuuuuuy tarde a esta entrada, pero para comentar en tu blog no importa el día, ¿no?

Hay que ser falso y gilipollas para ponerse al nivel de Paco Clavel con sotana.

(Sin más. Ya me he quedado algo más tranquila, que ya es algo, porque llevo un día demasiado indignada y cabreada).

Un beso y feliz año Andrés.

Andrés dijo...

Qué a gusto te habrás quedao, Zapa. La verdad es que le cabe Paco Clavel enterito, es calcao.
Feliz Año

Un abrazo, Alfonso, estoy al día de mi pueblo casi al minuto con tu blog, que sin duda es ya todo un acontecimiento.